Los rostros detrás de la Pottermanía

Artículo de la editora: Sara Andrea Vera
Fecha de publicación: 04/07/2002

Gracias a los miembros del Harry Potter Message Board que contestaron esta entrevista.

Son cientos los sitios web que hay en español y en inglés sobre Harry Potter. Sus fanáticos se cuentan por millones y las ventas del DVD batió la marca de "Titanic" (1996). Con números así, es fácil olvidar que lo más importante de esta verdadera adicción son los fanáticos. Y, mas precisamente, cómo Harry Potter ha cautivado a todo tipo de personas, de todas partes del mundo. Gente común y corriente, la mayoría de ellos con actividades rutinarias, pero que conversan de dragones, brujas, magos y hechizos como quien discute el estado del tiempo.

Aquí tenemos la experiencia de algunos de ellos, como Sarah (18 años, inglesa) que trabaja en una revista y cuyo jefe va a entrevistar a J.K. Rowling. Sin embargo ella no puede acompañarlo y lamenta su mala suerte. Al otro lado del Atlántico, en los Estados Unidos, vive otra fanática llamada Sarah (13 años) cuyo sueño era audicionar para "Harry Potter y la cámara secreta". Ella quería interpretar a Myrtle la llorona, pero explica que no pudo porque su padre "no aceptó sacarme del colegio y además hubiera tenido que pagar por los pasajes de avión [a Inglaterra] y no tengo tanto dinero".

El día que conocimos a Harry
Para algunos fue cosa de suerte, a otros no les quedó más que leer alguno de los libros y unos pocos se sintieron atraídos a ellos luego de ver la película. Pero es indudable que todos los Pottermaniacos recuerdan cómo se convirtieron en adictos.

Mehgan (14 años, estadounidense) conoció a Harry por casualidad. Su familia se iba de vacaciones y ella quería leer algo, pero no tenía nada interesante. Así que tomó dos de los libros de sus hermanos, los que resultaron ser los dos primeros tomos de la serie. "Comencé a leer el primero en el automóvil y ¡me encantó!", comenta. "No pude dejarlo durante las 2 horas y media que duró el viaje. Leí amboslibros ese mismo día".  

Bryndís (14 años, Islandia) recibió "Harry Potter y la piedra filosofal" como regalo cuando fue publicado en idioma islandés. Comezó a leerlo con recelo, pero pronto se sintió incapaz de dejarlo. Se apresuró a leer "Harry Potter y la cámara secreta" y no podía esperar para tener el siguientes. Lamentablemente aún no habían sido traducidos al islandés, explica, por lo que: "mi madre me compró la versión en inglés del Libro III y luego el Libro IV. Así que en cierta forma aprendí inglés leyendo Harry Potter".

Algo especial en la vida
Para la mayoría de los fanáticos, Harry Potter es mucho más que unos libros para entretenerse un rato. Es parte importante de sus vidas, a las que ha afectado de distintas maneras. Algunos se han animado a escribir y otros leen más que antes gracias a J.K. Rowling. Y si hay algo que se repite en todos es que se sienten parte de una comunidad sin límites geográficos, de edad o de sexo.

Maya tiene 12 años y vive en el estado de Florida, en los Estados Unidos. Confiesa que no soporta la espera hasta que salga el Libro V y reza para que lo publiquen pronto. Ella está segura que nunca podría cansarse de leer la serie y añade que "me hizo creer que hay magia en el mundo y me ha dado confianza en mí misma". Para Louise (18 años, inglesa) Harry Potter también ha sido especial y reconoce que nunca pensó que un libro pudiera ayudarla tanta. Entre otras cosas, le permite conversar del tema con sus amigos y su familia y le ha posibilitado hacer nuevas amistades.

Steven (30 años, estadounidense) trabaja como gerente de operaciones computacionales. Durante mucho tiempo, tanta publicidad sobre Harry Potter lo hizo resistirse a leer los libros o ver la película, pese a la insistencia de su hijo de 7 años. Sin embargo, tras comprar el DVD para su familia, se enamoró de la serie. Para él, esta ha sido mucho más que una afición para distraerse. "He estado leyendole el libro a mi hijo, uno o dos capítulos por noche", cuenta Steven. "Ha sido grandioso porque su lectura ha mejorado muchísimo. Él es dislexico... y porque se le dificulta leer, se frustra muchísimo y hasta hace poco mostraba muy poco interés en tomar un libro. ¡Ahora quiere acostarse temprano para comenzar a leer Harry Potter y saber qué pasará!."

Conviviendo con la Pottermanía
Para quienes son fieles seguidores de los libros de J.K. Rowling  la enorme popularidad de la serie tiene sus puntos positivos y negativos. Nuestras dos fanáticas llamadas Sarah coinciden en que les encanta el atractivo internacional de la serie, pues tienen amigos de diferentes países que aman a Harry Potter. Ambas también coinciden en que lo peor es, sin duda, algunas pésimas fanfics publicadas en Internet. Otra chica, Katherine (14 años, estadounidense), se lamenta que, una vez que te conviertes en adicta, el tiempo se hace muy largo en espera del siguiente volúmen (en especial del Libro V).

La explosión de mercadería y publicidad también tiene un sabor agridulce para los Pottermaniacos. A Michelle (16 años, inglesa), por ejemplo, le gustan algunos de los productos, pero afirma que "empezaron a salir juguetes, como el set de Posiones para preparar dulces, y me parece que ese tipo de cosas es basura".   Erin (13 años, estadounidense) va más lejos, ella detesta todos los artículos que se venden asociados a Harry, excepto los libros, por supuesto.


OTROS ARTÍCULOS

ENLACES RELACIONADOS